Esta famosísima obra del compositor alemán Carl Orff (1895-1982) está basada en una colección de cantos goliardos de los siglos XII Y XIII, que fueron hallados en el XIX en un documento encontrado en la abadía de Benediktbeuern (Baviera). El vocablo goliardo se utilizó en la Edad Media para referirse a cierto tipo de clérigos vagabundos y de vida licenciosa.
Carl Orff estrenó Carmina Burana en 1937, estructurada en forma de cantata escénica para orquesta y coros, con la intervención de solistas (soprano, tenor y bajo) y otorgando un papel destacado a la percusión. En la versión realizada por Orff que se presenta ahora en el Teatre Principal d'Inca dentro del 7è Festival MallorcÒpera, la orquesta se sustituye por dos pianos, manteniendo el resto de los elementos de la obra original.
Bajo la dirección de Bernat Xamena intervienen más de 50 músicos en el escenario, con la participación del Orfeó L’Harpa d’Inca, dirigido por Margalida Aguiló, el Orfeó d'Alaró, dirigido por Lluís Forteza, y el Cor y Ensemble de Percussió Euroclàssics.
También los solistas Francesc Blanco (piano), Neus Estarellas (piano), Sona Godarska (soprano), José M. Sánchez (tenor) y Lluís Sintes (barítono).